El caso es que hace un par de años en la boda de una tía, me dijo que era antitaurino, pero antitaurino de los chungos. Yo traté de explicarle, de hacerle ver que su postura no era la correcta, pero como suele pasar en estos casos, me topé con un muro de hormigón armado, ¡¡¡ni un pase tenía el gachón!!!
Cuando me topo con alguien así, intento contarle el "otro lado", la forma en la que yo veo los toros, la riqueza tan grande que esconde este maravilloso arte, pero siempre respetando las opiniones y no tratando de imponer la mía. Incluso me ofrezco a invitarles a los toros y a que me dejen mostrarles, aunque sea una sóla tarde, la grandeza de la tauromaquia. Algunas veces lo he conseguido y otras muchas no. Con mi primo Jose salió rana y lo dejé estar.
Ayer, dos años después, en el bautizo de mi hijo, me volví a encontrar con él, y cual fue mi sorpresa cuando me dijo que ¡¡¡era un asiduo a la Plaza de Las Ventas!!!!, su novia (tiran más dos tetas que un primo mayor) poco a poco le metió el "veneno". Ella es familiar de un novillero y le ha llevado a tentaderos y a varias corridas y le descubrió un mundo que no sólo desconocía, sino que despreciaba. Me dijo: "Fran, yo era antitaurino porque era un joven ignorante, y porque era la moda"... pecados de juventud.
Me contó que estuvo en las novilladas del mes de abril en Las Ventas, también en la corrida de la Beneficiencia, el día de la vuelta al ruedo de la cuadrilla de Castaño, y en el mano a mano de Cerro y Ritter. Que le encanta la estética, la puesta en escena, la solemnidad y todo lo que envuelve una tarde de toros. Que una tarde cualquiera se coge a su novia y se van a ver toros a Las Ventas o a cualquier pueblo de la provincia de Madrid. Que le gusta lo que representa Padilla, el arte de Morante y Robleño. Que es algo que le inspira y le llena, algo que le lleva a sacar su ipad y a hacer dibujos rápidos (como los que adornan este post)... ¡¡¡qué bonito!!! y ¡¡¡qué alegría!!! No veo el momento de compartir una tarde de toros con mi primo "el reconvertido"
Y ojo que él con 22 años, es de los que pagan, su escaso sueldo no le da para barreras, le da para andanadas de sol, pero paga. No necesita de promociones especiales para jóvenes, ni de invitaciones de toreros. Aquí al que le gusta y le llena, paga. Óle por él.
¿Cuántos habrá como él? ¿Cuantos antitaurinos habrá que lo son por ignorancia y moda?
Va por tí Jose, ayer me hiciste feliz.
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